Y el huevo se rompió

En una supuesta declaración de principios, uno pone sus condiciones. Pero al final...¿qué perdura? No entiendo muy bien qué ha pasado desde que decidí revelarme ante el ostracismo, hasta que me he dado cuenta de que me he integrado en la rutina de la cual quería huir. Supongo que será cuestión de tiempo. Y volveré otra vez a exigir mi cambio.

Metamorfosis. Bueno, no es tan malo, es como llevar una doble vida, solo que en vez de ser travesti de cabaret, superheroína o una supermaligna, he decido ponerme manos a la obra con esos asuntos pendientes. De momento: Un curso de guión.

Juro solemnemente que haré algún intervalo para escribir sobre cosas interesantes para el mundo. Y no párrafos de melancolía postadolescente edulcorada. Jaja!!

Pero eso para el próximo.

Oxígeno y Salud!!

Entre el público

Hoy entre eneldo y clavos, entre letras ajenas, entre recuerdos de experiencias pasadas, conocidas, contadas, leídas; me he dado cuenta de que hay personas que ganan y otras que se dejan ganar, personas que dejan huella y otras que siguen las pisadas sin alcanzar al que las marca. Personas entregadas, o no, que sin pensarlo se construyen un podio, y otras que siempre mirarán, desde el público con admiración, a los que tienen el valor de tensar los músculos apropiados para subir los peldaños que han elegido.

Hoy me dejo ganar, miro y admiro entre el público a aquellos que tienen el valor y el talento para escribir su destino, goma de borrar en mano por si hay que cambiar algo. Hoy es un día de esos en que te das cuenta que hay tanto que admirar que te sientes ridículo por haber pensado, un día, que estabas escribiendo tu historia y que podrías alcanzar ese sueño final, embarrado ahora bajo los pies de quienes miran, que un día pensaste "puedo conseguirlo".

Hoy es el día en que la realidad te mira a los ojos, después de arrearte una bofetada inesperada, y te pregunta: ¿EN QUÉ ESTABAS PENSANDO?

Pero sobre todo, hoy es el día en que me he dado cuenta de que ya no sé que quiero ser. Y cuando uno pierde ese norte que quería alcanzar...no le queda otra que bagar entre el público mirando al suelo en busca de ese papelito en el que, un día, escribiste en él qué querías ser cuando fueras mayor.



Cuando me duela el cuello de buscar, supongo que levantaré la cabeza en busca de otro nuevo horizonte que alcanzar.

Nos deja un grande: Benedetti

Se me olvidaron los complejos, solo me acordé de sonreír con el primer poema que leí de este grande que nos ha dejado. Mario Benedetti abrio mis ojos a un mundo más bonito, el mejor cuento sobre el sexo de los ángeles lo escribió él, y descubrió una faceta de las palabras que jamás pensé que existiera. Por si pica la curiosidad:

Y si Angel, para abrir el fuego, dice: "Semilla", Angela, para atizarlo, responde: "Surco". El dice: "Alud" y ella, tiernamente: "Abismo".

Las palabras se cruzan, vertiginosas como meteoritos o acariciantes como copos.

Angel dice: "Madero". Y Angela: "Caverna".

Aletean por ahí un Angel de la Guarda, misógino y silente, y un Angel de la Muerte, viudo y tenebroso. Pero el par amatorio no se interrumpe, sigue silabeando su amor.

El dice: "Manantial". Y ella: "Cuenca".

Las sílabas se impregnan de rocío y, aquí y allá, entre cristales de nieve, circulan el aire y su expectativa.

Angel dice: "Estoque", y Angela, radiante: "Herida". El dice: "Tañido", y ella: "Rebato".

Y en el preciso instante del orgasmo ultraterreno, los cirros y los cúmulos, los estratos y nimbos, se estremecen, tremolan, estallan, y el amor de los ángeles llueve copiosamente sobre el mundo.


Mario Benedetti: El sexo de los ángeles

El poema que se metió en mí:

ARCO IRIS

A veces
por supuesto
usted sonríe
y no importa lo linda
o lo fea
lo vieja
o lo joven
lo mucho
o lo poco
que usted realmente
sea

sonríe
cual si fuese
una revelación
y su sonrisa anula
todas las anteriores
caducan al instante
sus rostros como máscaras
sus ojos duros
frágiles
como espejos en óvalo
su boca de morder
su mentón de capricho
sus pómulos fragantes
sus párpados
su miedo

sonríe
y usted nace
asume el mundo
mira
sin mirar
indefensa
desnuda
transparente

y a lo mejor
si la sonrisa viene
de muy
de muy adentro
usted puede llorar
sencillamente
sin desgarrarse
sin deseperarse
sin convocar la muerte
ni sentirse vacía

llorar
sólo llorar

entonces su sonrisa
si todavia existe
se vuelve un arco iris.

GRAN ANTONIO VEGA, GRACIAS POETA!

Lucha de jigantes

Jamás dejará de ponerme un nudo en la garganta el oir su voz camino a Zamora, siempre marcará ese camino para mí, y el recuerdo del iniciarme en mi "elixir de juventud".

"Fue
el día en que escuché tu voz,
seguí su eco hasta un rincón.
Allí tomó la forma de canción.

Hoy
no hay ley que pueda atarte a mí.
Por eso sueño junto a ti.
Pues nunca dices nada por decir.
Es sensible y racional.

Yo me ocupo en descubrir
toda su facilidad para entenderme y sonreír.
Ella es mujer, niña, ella es mi chica.
Pues sin moverse me trae el Levante y el Sol.
Queriendo y sin darme cuenta
como un espejo reflejo su brillo y color.

Y es que hoy
aún quedan ojos que mirar.
No se oiga ni una queja más...

DEL ELIXIR DE JUVENTUD
BEBIMOS JUNTOS PROMETIÉNDONOS LA VIDA.
¿QUIÉN NOS LLAMÓ?, ¿QUÉ PUDO SER?.
NOS PUSO DE LA MANO DESDE EL PRIMER DÍA."


(Foto: Thomas Canet www.fotografosartisticos.es)